Luego de que se evacuara la propuesta de nueva Constitución en el Consejo Constitucional, las encuestas Black & White y Cadem, mostraron un incipiente aumento de la opción A Favor.

Mientras en la primera la preferencia pasó del 31% al 47% en la última semana (incremento de un 16%), en la segunda subió cuatro puntos situándose en 28%.

Semanas previas, lo que se había observado con mayor notoriedad era, por el contrario, el crecimiento de la opción En Contra, por lo que ¿se puede estar considerando un cambio en la tendencia? Para Rodolfo Disi, profesor USACH e investigador COES, lo primero que hay que mencionar es que "no todas las encuestas en Chile son iguales en términos técnicos y de representatividad.

Esto no es algo que la ciudadanía necesariamente sepa". Considerando eso, dijo que "para hablar de un cambio de tendencia, habría que observar cambios en varias encuestas al mismo tiempo y diferencias significativas de una medición a otra de la misma encuesta. En ese sentido, no creo todavía que se pueda hablar con mayor certeza de un cambio a favor de aprobar".

Su impresión respecto a los últimos resultados, es que "generan repercusión porque son llamativos. Sin embargo, es responsabilidad de los actores políticos y de los medios ponderarlos en base a su calidad técnica".

Una apreciación similar mostró Mario Herrera, académico e investigador del Centro de Análisis Político de la Universidad de Talca, pues precisó que "es muy pronto aún para sostener que hay un cambio de tendencia.

Más bien, lo que se observa en la encuesta es que el A Favor recupera la posición que tenía en junio de este año. Para ver un cambio de tendencia, la opción debería sobrepasar el 30%". Ahora bien, en una profundización, sostuvo que parte de las razones para el aumento de esta opción "están en la campaña comunicacional y en el posicionamiento que ha tenido el tema constituyente".

"Este proceso, a diferencia del anterior, ha recibido menos atención mediática. No obstante, en la medida en que nos acercamos al Plebiscito, los temas del proceso constituyente van ocupando espacio en la agenda. Ello, además, con el despliegue de republicanos y el uso del capital político de José Antonio Kast, ha sido clave posicionar temas que son vistos como positivos para la ciudadanía. Pero las cuentas no necesariamente son alegres.

Lograr un crecimiento de 6 puntos en dos semanas con todo el despliegue comunicacional es completamente insuficiente para revertir el escenario. La diferencia es aún mayor a 20 puntos entre ambas opciones", puntualizó.

Es por ello, que en su opinión "hay que mirar los resultados de las encuestas con precaución. Estas han mostrado baja precisión en escenarios de voto obligatorio, como el que tendremos en el Plebiscito de salida. Esa es una variable que crea incertidumbre en el proceso, aún cuando en la historia reciente de Chile, ninguna elección con tanto margen de diferencia se ha logrado revertir a cerca de dos meses del día de la elección". De todas maneras, indicó que con eso no quiere decir "que es imposible".

"Las últimas elecciones presidenciales, por ejemplo, mostraron un escenario de segunda vuelta impensado a comienzo de año. Los candidatos más probables eran Jadue y Lavín y la segunda vuelta fue entre Kast y Boric.

Algo similar ocurrió con el Plebiscito de salida. No obstante, el cruce en la opinión pública se produce en el tiempo, algo que ahora la opción A Favor no tiene".

Eolo Díaz-Tendero, director del Observatorio Transparencia e investigador de la Universidad de O'Higgins (UOH), tampoco considera que "se pueda marcar una tendencia todavía", toda vez que "una tendencia en estadística es una medición ordenada en el tiempo que tiene varios episodios hacia una misma tendencia de crecimiento o decrecimiento. En este caso, si una encuesta fuera semanal habría que esperar cuatro o cinco semanas para ver si hay una tendencia o no".

Es más, afirmó que "durante el mismo periodo en que se entregan las encuestas (antes mencionadas), apareció otra que muestra resultados distintos sobre el mismo tema. Entonces, tampoco se podría decir que comparando instrumentos que miden algo así como el mismo tema, podría marcarse una tendencia".

Su juicio es que los sondeos pueden estar mostrando "un proceso que empieza a decantar, por lo tanto, hay un cierre de un proceso y empieza una etapa mucho más clara, más prístina en términos de comprensión y, por lo tanto, la dicotomía hace aparecer como gran desafío los elementos de comunicación que se empiezan a gestionar de ahora en adelante por las partes".

"En ese sentido, parece que hay una relativa ventaja de aquellos que están por el apruebo, porque eso significa que ya tienen campaña, en cambio, hay otros sectores que no han definido todavía estrategias esperando los resultados finales", advirtió.

Finalmente, remarcó que "esto se va a jugar no tanto por el conocimiento específico que tengan los ciudadanos de cada uno de los artículos, sino del modo en que se comuniquen las miradas y evaluaciones sobre el proceso en general, y sobre algunos artículos que tengan impacto sobre la ciudadanía".