Por Eduardo Bascuñán

El proyecto de radares de monitoreo de tornados no presenta mayores avances a casi 5 años de su anuncio.

Fue tras los acontecimientos de mayo de 2019 ocurridos en Los Ángeles y Talcahuano que el entonces Presidente, Sebastián Piñera, daba cuenta de esta iniciativa que se extendería desde Valparaíso a Los Lagos, expresando que la idea era que los dispositivos “nos permitan anticiparnos a este cambio climático que ya se siente. Tenemos que aprender a vivir con este fenómeno que llegó para quedarse”.

En julio de 2023, y tal como lo publicó Diario Concepción, el proyecto seguía estancado, y sería el 26 de julio de ese año cuando se concretaría una reunión entre el Gobierno Regional y la Dirección General de Aeronáutica Civil (Dgac), instancia donde se abordaría el tema.

Ahora, de acuerdo al Gore, en esa oportunidad se invitó a la Dgac a presentar el proyecto ante el organismo para su correspondiente ingreso y votación, para ver de esa manera una vía de financiamiento.

De acuerdo a lo confirmado por el Gobierno Regional, hasta ahora, la entidad no ha ingresado ninguna propuesta.

Desde la Dgac respondieron que requieren “una actualización del proyecto para ser presentado a nivel nacional; con implementaciones regionales faseadas en una cantidad de años a definir”.

“El proyecto de Optimización de Alerta Temprana de la DMC tiene un alcance a nivel nacional, debido a que el equipamiento que se debe instalar (estaciones y radares meteorológicas) no es divisibles es decir, que para identificar un fenómeno meteorológico que se aproxima en una corta escala de tiempo (24-48 hrs) hacia la región, se requiere, ineludiblemente, que parte del equipamiento meteorológico sea instalado fuera de la región del Biobío, situación que no permite un sólo convenio de financiamiento con esa Gobernación Regional. La DMC se encuentra trabajando en una nueva iniciativa para presentar reapreciando la situación”, agregaron.

La importancia de la tecnología

Arnaldo Zúñiga, meteorólogo del Centro Meteorológico de Chile considera que la tecnología satelital de alta definición existente en el país no alcanza para conocer bien el fenómeno de los tornados. “Como el tornado se da en una escala muy pequeña, estamos hablando de cientos de metros y la formación en minutos, es muy difícil de pronosticar”.

“Por el tipo de nube que abarca un tornado, esta es bastante amplia y puede fácilmente abarcar  de 400 a 500 metros. Pero donde baja el mismo embudo es algo más complicado de definir y para eso necesitamos una tecnología mayor, con una alta resolución”, agregó. 

Para el experto la solución más óptima son los radares, pero agrega que: “En terrenos planos como Brasil o Argentina, la patagonia por ejemplo, no hay problema en cuanto al monitoreo con radares. Pero Chile, es un territorio muy accidentado geográficamente, entonces instalar radares acá es muy complicado”.

De paso, Zuñiga advirtió que para que se forme un tornado se deben cumplir ciertas condiciones. “Según hemos observado, los tornados se encuentran casi siempre presentes en precipitaciones muy concentradas en lugares pero también, con tormentas eléctricas”. 

“Nos ayuda en algo los detectores de tormentas, pero hablar de radares sería lo ideal, son palabras mayores y como no tenemos mucha experiencia en radares, todo esto debe ir acompañado de formación. Tenemos que formar a nuestros meteorólogos, capacitarlos para utilizar esta tecnología tal como en el resto del mundo”, afirmó.

Desastre

Vale recordar que los dos fenómenos de 2019 dejaron varias consecuencias. 

Es que el tornado del 30 de mayo, en Los Ángeles, dejó como saldo 18 heridos y 11 casas destruidas. Luego, en menos de 24 horas, el hito que abarcó desde Talcahuano a Concepción registró un fallecido, 23 heridos y casi 500 casas con daños.

Uno de los sectores más afectados fue el de Brisas del Sol en la comuna puerto. Una de las imágenes más documentadas fue el de los hogares sin techo ni ventanas, como el de automóviles al interior de una pileta.

Nicolás Olguín, vecino del Brisas del Sol, dijo que este tipo de tecnologías son necesarias. “Es información que se podría ir canalizando por medio de la Junta de Vecinos. Sería bueno tener reportes hasta mensuales de temporales”.

“Esto es mucho más importante ahora que viene el invierno”, agregó Olguín.