Entre aplausos y después de un año de estar hospitalizado, fue dado de alta desde el Centro de Costo de Neurología del Complejo Asistencial “Dr. Víctor Ríos Ruiz”, Don Luis Oviedo, un angelino de 66 años por una enfermedad que paralizó su cuerpo, y también su núcleo familiar.

“Yo llegué el 26 de enero del 2023, llegué al hospital casi inconsciente y aquí se me borró la película. Ahora que me voy, seguiré con mi rehabilitación y si estoy capacitado seguiré trabajando, pero siempre preocupado de mi salud”, indicó Luis Oviedo al recordad su paso por el Centro de Salud.

Por su parte, la Dra. Daniela Regonesi -neuróloga del CAVRR- dio cuenta de su tratamiento, “después de múltiples estudios, el diagnóstico más compatible es un síndrome de Guillain-Barré, que es una enfermedad que ataca los nervios y produce dificultad en el movimiento de las extremidades y también para respirar.

Él estuvo ventilado, incluso fue postulado al programa AVIA (Asistencia Ventilatoria no Invasiva en Adultos) para irse con ventilador mecánico a la casa, pero gracias a la rehabilitación que tuvo, ahora se va sin ventilador, comiendo por la boca y caminando con asistencia”.

Desde aprender a comer hasta hablar, fue el trabajo que tuvieron que realizar distintos profesionales del Complejo Asistencial. Natalia Villouta- fonoaudióloga de Neurología, detalló que, “primero logramos un buen manejo de secreciones, que quiere decir esto, que él lograra deglutir su saliva sin riesgo de generar una neumonía aspirativa.

Luego de eso pudimos empezar a trabajar a la vez con ingestas de alimento en volúmenes muy bajitos, pero también teníamos la parte de la comunicación que era muy importante para él porque llevaba meses sin poder comunicarse con su familia, no podía tampoco usar un tablero de comunicación o escribir”.

En la actualidad, Don Luis se encuentra trabajando en su recuperación, así lo manifestó Francisco Arratia, Kinesiólogo que lo ha acompañado por todo su periodo, “hoy Luis está logrando sentarse ya casi independiente con muy poca ayuda, logrando ponerse de pie con un poco más de asistencia, y ya logramos marcha terapéutica que es lo que hacemos.

Por lo mismo, en una señal de agradecimiento y a través de una carta, don Luis Oviedo y su hija Carolina agradecieron el volver a su hogar. “Me comprometo de ir cada día dando lo mejor de mí para volver a ser el hombre que era antes y poder decir que he ganado esta batalla. Con gratitud, Luis Hernán Oviedo Pereira”, se cierra la minuta que entregaron a la dirección del Complejo.