Hasta el sitio donde se produjo uno de los múltiples focos de incendios en Quebrada Honda en Tomé llegaron la Delegada Presidencial del Biobío, Daniela Dredsner junto a funcionarios de la Unidad de Análisis y Diagnóstico (UAD) de la Conaf para indagar las causas de los recientes siniestros y de esta manera, determinar su intencionalidad.

Además, en el lugar la autoridad regional realizó un balance de la actual temporada de incendios forestales donde se destacó la disminución de siniestros en un 97% respecto de la temporada anterior, aunque la Delegada Dresdner reconoció que el año anterior presenta una alta base comparativa.

“Si lo vemos en el quinquenio, estamos hablando de un 89% de disminución de hectáreas quemadas que son muy buenos números para la Región del Biobío y desde luego lo que aquí cuenta es poder seguir trabajando para que esto se repita en las siguientes temporadas”, puntualizó la autoridad, agregando que la clave en estos resultados positivos tiene que ver con la labor colaborativa desde marzo del año pasado por parte de Conaf de “preparación de comunidades, de los distintos municipios y el trabajo que se hizo en conjunto con comunidades escolares, con juntas de vecinos para poder generar patrullajes comunitarios, pero también la coordinación constantes que son las instituciones del Estado y con Corma, que es esencial para estos resultados, con las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile en las zonas que es necesario”.  

Por su parte, el director regional de Conaf, Rodrigo Jara ratificó este planteamiento asegurando que esta temporada ha sido distinta con una baja en la ocurrencia del 27% y 1.200 focos con 5 mil hectáreas afectadas y un 97% menos de afectación.

“Han sido buenas cifras pero la temporada aún no finaliza, nos queda todavía verano y un otoño bastante seco. Nuestras brigadas van a estar trabajando hasta fines de mayo, por lo tanto, volvemos a hacer el llamado permanente que hemos hecho a la ciudadanía: mantener una conducta de corresponsabilidad y evitar cualquier acción de riesgo que pueda provocar incendios forestales”, recalcó Jara.

Además, el representante de la Corporación Nacional Forestal destacó la labor de la UAD en la investigación de siniestros, detallando que su principal objetivo es “determinar el origen de los incendios y también orientar nuestras campañas de prevención. Siempre nuestros informes de investigación quedan a disposición de la fiscalía y las policías para cuando lo requieren”.

En esta línea, Rodrigo Jara informó las metas en las indagatorias de la Unidad de Análisis y Diagnóstico que esperan investigar 580 incendios, de los cuales ya han analizado sobre 400 casos con un 47% de intencionalidad detectada.