Regional
Crónica
Social
30/06/2024
Con 40 o más años trabajando, aún con sueños por cumplir, con deudas por pagar o simplemente por mantenerse ocupados, los adultos mayores de la región del Biobío se desempeñan en distintas labores siendo jubilados.
En Concepción, la oferta laboral en las empresas, ligadas a la Cámara de Comercio, resulta favorable para las mujeres mayores, ya que, según lo indicó, Sara Cepeda, presidenta del gremio, ellas presentan un mayor compromiso y responsabilidad laboral.
El centro penquista, con su amplia vida comercial, despierta día tras día al ritmo de sus cortinas metálicas levantándose para invitar a transeúntes a pasear contemplando sus llamativas vitrinas.
Personas de todas las edades atienden sus locales destinados a ofrecer una amplia variedad de productos pero, según lo indicó Sara Cepeda, presidenta de la Cámara de Comercio y Turismo de Concepción, desde que finalizó el estallido social, la mayor integración de adultos mayores se ha hecho presente en el centro. ”Nosotros como Cámara de Comercio, desde el 2020, tenemos como prioridad dar empleo a las mujeres sobre los 55 años. Actualmente, el 90% de nuestras contratadas son mujeres y gran parte de ese porcentaje son mayores”.
En busca de contratar una mejor calidad de personal, Cepeda aseguró que uno de los motivos principales para preferir contratar mujeres mayores, se debe a su sentido de responsabilidad laboral. “El compromiso, la madurez y el valor que le entregan al trabajo son las principales razones por las cuales preferimos a damas de mayor edad para trabajar, además, a los 55 años o más están en pleno apogeo y su edad no es un impedimento para realizar labores que, obviamente, no requieran de fuerzas que puedan dañar su integridad física”.
“Los adultos mayores buscan labores para sentirse útiles y generar ingresos” , opinó Luis Méndez Briones, director del Observatorio Laboral de la región del Biobío.
Según señaló, los trabajos en los que comúnmente se desenvuelven las personas por sobre los 60 años son de carácter de servicio, personales y de información. “Los oficios más habituales en estas personas son en el comercio, en los servicios domésticos, en la educación y en algunas áreas de la salud. Algunos actúan como cuidadores entre ellos mismos, aprovechando de sus capacidades para atender a quien ya no las tiene”. Además, en vista del cuidado de la integridad física de los adultos mayores, “estos no suelen trabajar en áreas que les demanden un mayor esfuerzo físico, por lo tanto, es muy difícil que se desempeñen, por ejemplo, en el área de la construcción”.
En cuanto a búsqueda y desempeño, actualmente, en la región del Biobío son 62 mil 542 personas mayores de 60 años quienes se encuentran activamente dentro del área laboral, según lo indicado por Méndez, añadiendo además que “la tasa de desempleo bajó en un 8,8% en lo que va de junio”.
Según lo indicado en el Termómetro Laboral de la región del Biobío del mes en curso, la tasa de ocupación de las mujeres mayores de 60 años es de 16,8%, mientras que la de desocupación indica un 4,6%. Por su parte, en el área masculina de 65 años o más, la tasa de ocupación arrojó una cifra de un 25,5 %, mientras que la de desocupación indicó un 2,4%”.
En busca de mejorar la calidad de vida de los jubilados, Sandra Quintana, seremi del Trabajo y Previsión Social del Biobío, aseguró que en el Congreso se está generando un proyecto de ley para mejorar las pensiones. “Este proyecto transformaría la realidad que hoy día tienen los miles de trabajadores que se han retirado y que no poseen una pensión suficiente para vivir con dignidad, lo que muchas veces los ha obligado a continuar en el mundo laboral para solventar sus necesidades”.
Según lo aclaró la seremi, para comparar la situación en la región del Biobío, entre el 2019 y el 2024, la cantidad de adultos mayores creció notablemente. “Hace seis años teníamos 198.345 jubilados y ahora existen 232.262, por lo tanto, la población se está envejeciendo”, aseveró.
Para contar un poco sobre la historia de las pensiones actuales, la seremi relató que la PGU (Pensión Garantizada Universal), comenzó a implementarse poco después de que inició el actual Gobierno con el fin de beneficiar a la gran mayoría de los jubilados, ayudando así a lograr su independencia económica. “La PGU se transformó en la base de las pensiones de muchos adultos mayores.
En julio del 2023 nos dimos cuenta de que la cobertura de dicho beneficio no era suficiente y que un grupo importante de personas no lo recibían. Por lo tanto la cobertura se amplió en un 70% y luego al 90%. Con esto nos dábamos cuenta de que la cantidad de pensionados va en constante aumento y que constantemente se va acrecentando la pobreza en los jubilados”.