Nacional
Crónica
Policial
29/08/2024
A casi dos semanas del violento atraco que afectó a la sucursal de la empresa de valores Brinks en Rancagua, en el que cerca de 25 sujetos irrumpieron con armamento de grueso calibre hacia las dependencias de la empresa, se conoció el monto exacto que sustrajo la banda.
La información se hizo pública en la querella que presentó Brinks en contra de los detenidos hasta ahora por el caso, que ya suman 20 personas. La acción judicial incluye a dos ex trabajadores de la firma, un guardia y una cajera, quienes habrían colaborado para que se concretara el delito.
Todos se encuentran en prisión preventiva tras ser formalizados en el Juzgado de Garantía de Rancagua, imputados por diversos delitos como robo con intimidación, asociación criminal, porte ilegal de armas de fuego prohibida, porte de elementos incendiarios y receptación de vehículos motorizados e incendios.
A los ex trabajadores, además, se les acusa de violación de secreto comercial.
En la querella, la empresa de valores detalló que en total se sustrajeron $11.465.818.468, los cuales aún no han sido encontrados por las policías.
La dinámica del robo
En la acción ingresada por Brinks, la firma explica la dinámica en que habrían ocurrido los hechos esa tarde del pasado 18 de agosto en la capital de la Región de O'Higgins.
De acuerdo al relato de la querella, el planificado asalto se perpetró en tres etapas, las cuales comenzaron a eso de las 12:30 horas cuando la ex cajera salió a fumar al exterior de las oficinas acompañada de otras tres trabajadoras.
Allí, fueron abordadas de manera violenta por "siete individuos a rostro cubierto, uno de ellos premunido con un fusil AK-47", que previamente habían descendido desde un vehículo.
Una vez logró la banda ingresar al recinto -continúa el documento-, el ex guardia "procedió a la apertura de cuatro puertas a través de la botonera que se encontraba en su puesto de trabajo, permitiendo que cuatro sujetos llegasen a la sala de proceso, quienes, digitando la clave de acceso, lograron ingresar y proceder al llenado de carros con cajas que contenían remesas de dinero".
Según la querella, ahí inició la segunda fase del plan: el ingreso de otro grupo que escaló el muro perimetral para llevarse el dinero. Fueron ocho individuos quienes, movilizados en tres vehículos y mediante la utilización de escalas, "procedieron a cortar los cercos eléctricos de seguridad ubicados en el muro perimetral de la empresa, ingresando a la sucursal de Brinks".
Tras lo anterior, los antisociales trasladaron el dinero hacia el exterior de las dependencias de la firma, lo subieron a un vehículo y escaparon en distintas direcciones, dando paso a la tercera etapa del atraco.
"Se dio inicio a una persecución policial, desde Avenida Río Loco hacia Camino La Estrella, en el sector de San Ramón, movilizados los imputados a bordo de los vehículos Hyundai de color blanco y Ford de color gris, realizando además un cambio de vehículo desde el Chevrolet Silverado color negro a un furgón Hyundai H1, color gris, comenzando un intercambio de disparos con personal policial", señala la querella.
En ese instante, entró en acción un tercer grupo, con el fin de retener a la policía mediante la instalación de barricadas y la realización de incendios, para conseguir la huida del automóvil con el botín.
"Mientras los otros individuos ejecutaban las funciones encomendadas en el marco del plan criminal, un tercer grupo de sujetos (...) fue el encargado de dar cobertura a los ejecutores, efectuando disparos y maniobras distractivas", cerró el texto.