Bajo el lema “Fortaleciendo el liderazgo de mujeres rurales e indígenas en la gestión sostenible de bosques y territorios”, cerca de cuarenta mujeres beneficiarias de la Estrategia Nacional de Cambio Climático y Recursos Vegetacionales liderada por CONAF y su proyecto +Bosques, que cuenta con el apoyo técnico de FAO, participaron en un taller cuyo objetivo era entregar herramientas y capacidades a mujeres en torno a la activa participación que han tenido en sus territorios para combatir el cambio climático a través de distintas medidas de acción enfocadas en el bosque nativo.

Durante las actividades desarrolladas en las comunas de Cañete y Florida, las participantes trabajaron de forma muy participativa, analizando la importancia y los desafíos actuales en la gestión sostenible de bosques y territorios rurales e indígenas; conocieron herramientas para fortalecer el liderazgo femenino e integrar enfoques interculturales en la gestión de bosques, fomentar la vinculación con redes de articulación comunitaria entre mujeres rurales e indígenas, por último analizaron experiencias locales exitosas de mujeres en el uso, manejo y gestión sostenible de bosques.

Para el director regional de Biobío de la Corporación Nacional Forestal, CONAF, Rodrigo Jara, “este tipo de capacitaciones son una ganancia no solo para las mujeres que participaron, sino también para el trabajo que realiza CONAF. Contar con mujeres capacitadas, empoderadas, fortalece nuestra gestión en torno al cuidado de los bosques, pero por sobre todo, son aliadas para hacer frente a la crisis climática.

Otro punto destacable de estos talleres, fue la participación de la directora regional de Prodemu, Paula Marín, quien entregó información detallada de la oferta programática de la Fundación, para la articulación en la gestión comunitaria de las mujeres a través de esta organización que promueve el desarrollo de las mujeres rurales. 

Camila Chaparro, de Fundación Re Verde y participante del taller en la comuna de Cañete, indica sobre la jornada, “fui invitada por ser mujer rural, beneficiaria del Proyecto +Bosques, vine porque me interesa esta experiencia y conocer a otras mujeres que estén en lo mismo. Me parece bien esta actividad, se alinea con la visión más moderna, donde las mujeres estamos más en posiciones de poder y más activas en los movimientos sociales. Hay que resaltar a la mujer, sobre todo en contextos rurales donde todavía falta harto trabajo al respecto. En mi caso, ahora que estamos reforestando y tenemos un estero que corre cerca de la plantación, estoy de alguna forma contribuyendo a combatir el cambio climático”.

Para Pablo Honeyman, Coordinador Nacional del Proyecto +Bosques, “este tipo de talleres los estamos replicando      en todas las regiones donde implementamos las acciones del proyecto, es decir, desde Maule a Los Lagos. En estas intervenciones de restauración y forestación las mujeres han tomado un rol protagónico, lo que nos parece de suma importancia, teniendo en cuenta que son uno de los grupos objetivos de la estrategia REDD+ del país liderada por CONAF, así como también para el apoyo técnico de FAO”.

Por último, ambos talleres incluyeron visitas en terreno, en el caso de Cañete visitaron a  Sonia Carrasco Antileo, recolectora de hierbas por más de 24 años y representante de una empresa dedicada a la producción de hierbas medicinales y el desarrollo de productos cosméticos y derivados. En la comuna de Florida, visitaron los predios de Patricia Fuentealba y Nelly Carrasco, donde las participantes pudieron revisar iniciativas locales en el uso y gestión del bosque, además de conocer en terreno prácticas sostenibles con especies nativas.

La Estrategia Nacional de Cambio Climático y Recursos Vegetacionales de CONAF y su proyecto +Bosques, que cuenta con el apoyo técnico de FAO, es uno de los instrumentos clave de política pública para la lucha contra el cambio climático en Chile, ya que incorpora el Enfoque REDD+ de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), que tiene por fin evitar, mitigar y/o minimizar los potenciales impactos negativos sobre el medio ambiente y las personas, así como maximizar los beneficios para las comunidades locales involucradas en la implementación.