Crónica
Política
Salud
01/10/2025
En medio del debate por el Presupuesto 2026, senadores del oficialismo y de la Democracia Cristiana endurecieron su postura frente al Ministerio de Salud (Minsal) y anunciaron que no respaldarán nuevos acuerdos en el ámbito sanitario mientras no se cumpla el protocolo establecido en 2025.
Según la Dirección de Presupuestos (Dipres), solo un 43 % de los compromisos del protocolo de salud suscrito entre el Ejecutivo y el Congreso se ha concretado hasta ahora, lo que ha generado fuertes críticas por parte de parlamentarios que consideran que la credibilidad del Minsal está cuestionada.
El senador Juan Luis Castro (PS) calificó el nivel de ejecución como un “incumplimiento importante” y afirmó que “menos de la mitad de los compromisos se encuentran cumplidos” imposibilita avanzar en nuevos pactos.
Por su parte, Iván Flores (DC), presidente de la Comisión de Salud del Senado, sostuvo que “ya no se le puede creer al Ministerio de Salud” ante el magro informe de la Dipres, que por su parte fue recibido “como un balde de agua fría”.
Quienes critican el bajo nivel de cumplimiento señalan que entre las medidas pendientes están la implementación efectiva del plan de seguridad en los centros de atención primaria, y la creación de un sistema nacional de listas de espera mediante interoperabilidad entre servicios de salud.
Desde el Minsal, en respuesta, se ha defendido el avance realizado. Se argumenta que algunas medidas del protocolo sí se han cumplido, como el Plan Nacional de Formación de Especialistas, la actualización del plan de productividad quirúrgica y la tramitación de la Ley de Subsidio de Incapacidad Laboral (SIL).
El rechazo de los senadores formaliza un escenario de alta tensión para la aprobación del Presupuesto de Salud 2026. El desacuerdo legislativo se da en un contexto ya cargado: el país se alista para elecciones presidenciales y parlamentarias, lo que podría transformar el debate presupuestario en un pulso político.
Los parlamentarios advierten que no entregarán apoyo a nuevas iniciativas en salud si antes el Ejecutivo no muestra un cumplimiento claro del protocolo ya firmado. Esa condición, según ellos, se vuelve esencial para restablecer confianza institucional en los procesos presupuestarios.