Un malestar creciente ha emergido en la comunidad local tras conocerse que durante la temporada de primavera se ha comenzado la tala de árboles en calle Ercilla, lo que ha despertado críticas y preocupación entre los vecinos del sector.

Vecinos del tramo de calle Ercilla entre Lientur y avenida Tucapel afirman que los árboles que han sido removidos ofrecían sombra y frescura en los días más cálidos, además de contribuir a la calidad del aire.

La presidenta del Comité de Defensa Patrimonial de Los Ángeles (Codepala), Nivia Riquelme, ha manifestado que Ercilla constituye uno de los pulmones verdes de la ciudad y que la tala indiscriminada afecta la calidad de vida de los habitantes.

Impactos y consideraciones ambientales

Los expertos en urbanismo y medio ambiente suelen advertir que la tala en zonas urbanas implica:

• Aumento de temperatura local debido a menor sombra.

• Mayor demanda energética por climatización en casas y negocios.

• Pérdida de hábitat para fauna (aves, insectos).

• Disminución de capacidad de absorción de CO₂ y filtrado de partículas contaminantes.

En ciudades con escasez hídrica, estos árboles también ayudan a retener humedad en el suelo y reducir la escorrentía. Su eliminación puede agravar problemas de erosión o saturación en lluvias intensas.