El Banco Central publicó el Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del segundo semestre del 2025, donde analizaron las perspectivas económicas nacionales y ofrecieron soluciones para mejorar las condiciones de financiamiento.

El documento, presentado ante la Comisión de Hacienda del Senado en un paréntesis a la semana regional en curso, llega en un momento clave: en pleno debate del Presupuesto 2026.

De acuerdo al ente emisor, las condiciones financieras del país "exhiben una leve mejora respecto al informe de mayo", mientras que las tasas de interés de largo plazo registraron una leve disminución.

El texto también precisa que en los hogares, las vulnerabilidades se mantienen en niveles bajos, asimismo en las empresas, que disminuyeron sus indicadores de endeudamiento, carga financiera e impago, reflejando una menor vulnerabilidad financiera.

Sin embargo, advierten que la persistencia de déficits estructurales por varios años ha reducido las holguras fiscales y ha aumentado la deuda pública.

"Mantener la cautela en las cuentas fiscales, a través de un endeudamiento soberano sostenible, es una tarea fundamental para preservar adecuadas condiciones de financiamiento para hogares y empresas y también para la capacidad de la economía de mitigar el impacto de futuros shocks", plantearon desde el Central.

Por lo anterior, el académico de la Facultad de Negocios y Tecnología de la Universidad Gabriela Mistral, Gustavo Díaz, indicó que "estamos aproximándonos a los niveles macroprudenciales. Si bien no hay un colapso inminente o algún riesgo de insolvencia importante, sí hay una tendencia que hay que vigilar. Y esa tendencia nos habla de una tendencia persistente a un mayor déficit".

"En este contexto, las holguras fiscales son importantes. No son solamente un indicador macroeconómico, son grados de libertad que tiene el país para poder aplicar políticas contracíclicas muy necesarias cuando el entorno se vuelve complejo, se vuelve adverso", complementó.

El principal riesgo para la economía local

En el informe, el ente emisor también advirtió que el principal riesgo para la economía local "continúa siendo un estrechamiento abrupto de las condiciones de financiamiento por un deterioro del escenario externo".

La presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, detalló los efectos que una situación de esta naturaleza: "Un episodio de este tipo podría generar modificaciones significativas en las condiciones financieras globales. Por ejemplo, un aumento en los premios por riesgo que eleve fuertemente las tasas de largo plazo, lo que se transmitiría a las economías emergentes a través de varios canales", explicó.

Asimismo, "podríamos observar episodios de salida de capital, volatilidad, aumentos en las tasas de interés, reducciones de los precios de activos financieros en general", agregó.