Una verdadera explosión financiera se está viviendo tras las elecciones. El peso chileno, la bolsa y la deuda soberana reaccionaron con fuerza, impulsados por la amplia ventaja de José Antonio Kast y la percepción de que el candidato del Partido Republicano podría llegar a La Moneda en diciembre.

Según reportes de Bloomberg y análisis difundidos, los inversionistas ya comenzaron a mover sus fichas: el peso chileno se fortaleció y podría seguir subiendo entre un 4% y 8% durante los próximos meses, según estimaciones de Bank of America y J.P. Morgan.

MERCADOS EN MODO “ALZA”

Las señales fueron inmediatas. La moneda local se apreció, mientras que fondos internacionales comenzaron a sobreponderar bonos chilenos, apostando por un clima político más estable y pro-crecimiento.

Barclays, Credicorp Capital y otros actores financieros recalcan que el mercado “ya descuenta” un eventual triunfo del candidato republicano.

¿QUÉ ESTÁ IMPULSANDO EL SALTO?

• Expectativa de mayor estabilidad institucional.

• Agenda más pro-inversión en caso de que Kast gane la segunda vuelta.

• Un Congreso sin mayorías absolutas, que para algunos inversionistas reduce el riesgo de cambios extremos.

PERO NO TODO ESTÁ DEFINIDO

Pese a la euforia del mercado, los analistas advierten que la gobernabilidad será clave. La derecha no controla por sí sola el Parlamento, por lo que cualquier reforma dependerá de acuerdos políticos.

Además, aún hay incertidumbres en materia fiscal, minera y laboral, que podrían influir en la confianza externa y en el comportamiento de los activos durante los próximos meses.

UN MERCADO QUE YA TOMÓ PARTIDO

Mientras avanza la carrera hacia la segunda vuelta, los números no mienten: los activos chilenos están en su mejor momento post electoral y los inversionistas, nacionales e internacionales, parecen haber marcado su preferencia.

El mercado ya votó. Ahora falta el país.