El presidente de la Asociación Nacional de Fiscales (ANF) del Ministerio Público, Francisco Bravo, reconoció este jueves una sobrecarga de trabajo de los persecutores y de las policías e imploró la creación de fiscalías supraterritoriales, con el objetivo de "enfocar las energías en los delitos más graves".

En entrevista con El Diario de Cooperativa, el investigador de la zona Metropolitana Centro Norte dijo que "como autocrítica podemos decir que el sistema procesal penal está congestionado hace mucho tiempo".

"Tenemos 1,3 millones de causas que se ingresan al año, lo que significan más o menos 1.800 causas por cada fiscal. Las proyecciones iniciales de la reforma procesal indicaban que lo ideal es que cada fiscal no tuviera más de 1.000", detalló.

Bravo agregó que "las policías también están congestionadas": en Santiago, explicó, las instituciones "están naturalmente sobrepasadas por la demanda de instrucciones que damos sobre homicidios".

"La tasa es de 1,5 homicidios al día en Chile, cerca de 1.000 homicidios al año. Eso es mucho para lo que eran en 2010, cuando teníamos 500", expuso. 

En medio de este colapso, el líder de la ANF apuntó que "hay un gran porcentaje de delitos, como los hurtos, que demandan una gran capacidad y un tiempo para los fiscales y que son delitos menores", cuando "las energías del Ministerio Público deberían dirigirse esencialmente al crimen organizado: las armas, los homicidios, el narcotráfico, la corrupción".

"Lo que hemos planteado como asociación, y lo hemos planteado en la Convención Constitucional, es que se creen fiscalías supraterritoriales especializadas en estas áreas, que trabajen con policías especializadas en estas áreas, porque ahí vamos a dar una respuesta mucho más eficiente, vamos a dejar de trabajar en el caso a caso y ver el fenómeno delictual", agregó.

CONSEJO SUPERIOR APROBADO EN COMISIÓN DE LA CONVENCIÓN "VA EN EL SENTIDO CONTRARIO" Y DEBE REESTUDIARSE

La Comisión de Sistemas de Justicia de la Convención aprobó y despachó el último informe de su bloque temático, que deberá ser votado en el Pleno. En esta propuesta la Fiscalía deja de ser una institución dirigida de manera unipersonal y será gobernada por un órgano colegiado.

"Valorando una serie de otros aspectos, respecto a la dirección del Ministerio Público tenemos una crítica y llamamos a los convencionales a reestudiar el tema de la dirección", dijo Bravo.

El presidente de la ANF afirmó que "en la medida que tengamos un órgano colegiado dirigiendo al Ministerio Público, apuntamos precisamente en el sentido contrario, con mucha más ineficacia. El Ministerio Público necesita una autoridad unipersonal, robusta y a la cual además podamos hacer responsable de las decisiones que se toman".

"Se requiere una mirada clara, una directriz clara, única; no siete miradas. Imagínese un consejo en que haya división interna, en que cuatro estén de acuerdo y tres no en alguna materia", subrayó.