Un solo disparo en la cabeza bastó para terminar con la vida de una adolescente en Chillán la madrugada del lunes. Tenía 13 años y recibió un impacto de bala mientras se trasladaba en un vehículo con tres acompañantes, uno de ellos también herido, pero fuera de riesgo vital. 

Este caso se repite a lo largo de Chile, donde niños, niñas y adolescentes (NNA) sufren las consecuencias de la violencia e inseguridad en sus barrios. 

Cifras de la Subsecretaría de Prevención del Delito indican que el año pasado hubo 135 niños, niñas y adolescentes víctimas de lesiones con armas de fuego, homicidios con armas de fuego y disparos injustificados en la vía pública. 

Fueron 29 los niños, niñas y adolescentes que murieron por causas relacionadas a impactos de bala: siete de ellos tenían entre 1 y 11 años. Los otros 22, entre 13 y 17 años. La mayoría de los disparos les provocó traumatismos de la cabeza y del  tórax: de los 29 NNA,  20 tuvieron heridas de este tipo.

Xhiomara Gómez (15), disparo mientras iba caminando; Dylan Obregón (8), balazo mientras iba en la micro; Tamara Moya (5), impacto de bala cuando iba en auto; y Baltazar Díaz (0), herido con arma de fuego mientras dormía en su casa. 

Las cifras del Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) del Ministerio de Salud, señalan que entre 2020 y 2021 fallecieron 62 niños, niñas y adolescentes por disparos de armas de fuego. La Región Metropolitana (RM) concentra 33 de estos casos. La mayoría se concentra en La Pintana, con 10 casos.

El DEIS tiene datos que contabilizan las causas de muertes derivadas de impactos balísticos, pero no hay una categorización específica para las llamadas “balas locas”.

Gran parte de los disparos ocurren en la vía pública, con un total de 12. Luego vienen los ataques ocurridos en viviendas, con 6 crímenes. En los otros 44 casos, se informa que ocurrieron en un lugar no especificado.

Fuera de la RM, entre 2020 y 2021 la región que más casos concentra es Coquimbo. De sus cinco muertes por disparos, dos ocurrieron en La Serena, dos en Ovalle y una en Los Vilos. De cerca le siguen La Araucanía y Biobío, ambas con cuatro casos. 

Más atrás está Antofagasta y Tarapacá con tres fallecimientos; cerrando la lista Ñuble, Valparaíso, Libertador B. O'Higgins y Maule, cada una con dos muertes.