Los empresarios reaccionaron, y no con satisfacción, a la Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric, apuntando que se insiste en una reforma tributaria y además no se aprecia preocupación por mejorar la producción del país.

"Esperábamos medidas destinadas a concretar la meta de aumentar en un 1,5% anual la productividad del país, ¿dónde quedó esa promesa? Nos gustaría saber si esa cifra ya no está dentro de los objetivos del Gobierno", comentó el timonel de Asimet, Dante Arrigoni.

El líder de los industriales metalúrgicos dijo que ya en 2022 el Mandatario se comprometió a elevar esa cifra, "factor clave para que el país pueda alcanzar un crecimiento de largo plazo. El cuarto trimestre de 2022 Chile exhibió una caída de 5,6% en este índice, cerrando el año con una cifra negativa de 2,8%".

Desde la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), su timonel, Jorge Riesco, apuntó a poner los impuestos como un eje del Gobierno: "Nos parece que la insistencia en la reforma tributaria representa un riesgo importante para lograr los objetivos planteados de aumento de inversiones y de mayor crecimiento económico".

"Destacamos el compromiso del Presidente en cuanto a cuidar la economía y su reconocimiento de que la estabilidad es fundamental para que los chilenos y chilenas alcancen sus metas. En este sentido, esperamos que el Gobierno pueda llevar a cabo una hoja de ruta que precisamente propenda a esa estabilidad y un crecimiento sostenido, lo que requiere de certidumbres, reglas claras y medidas proinversión", subrayó.

El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Ricardo Mewes, quien estaba en Valparaíso como invitado a la ceremonia, dijo que su preocupación es que "todo está sujeto a la reforma tributaria y no vemos un ajuste al gasto del Estado, a la modernización del Estado, tampoco vemos cómo vamos a abordar los temas de contrabando, de informalidad, de evasión de IVA, que tanto le afecta al país".